Cuando las personas piensan en hacer ejercicio para ayudarse a estar más saludables, generalmente piensan en el contexto de la pérdida de peso y la mejora de la salud cardiovascular. Por bueno que sea, hay otro componente del ejercicio en el que debe pensar: su sistema inmunológico.
El ejercicio puede mejorar directamente su sistema inmunológico de varias maneras, lo que significa que si bien pierde peso, también está ayudando a evitar enfermarse. Lo primero que hace el ejercicio para ayudar a prevenir enfermedades es elevar la temperatura de su cuerpo.
Si ha hecho ejercicio en el pasado, seguramente habrá notado que se calienta durante un entrenamiento, ya que su sangre corre más rápido y más fuerte por su cuerpo. En algunos casos, esto puede ser similar a una fiebre leve, matando ciertas enfermedades que están tratando de establecerse en su cuerpo.
Calentarse y sudar es una forma rápida de quemar algunas calorías y matar algunas bacterias desagradables. En un sentido similar, obtener el bombeo de sangre agrega otro beneficio. Su sangre contiene glóbulos blancos, que son las células responsables de combatir las bacterias y enfermedades cuando las encuentran.
Cuando hace ejercicio y realmente hace que su sangre fluya más rápido, tiene una mejor oportunidad de que sus glóbulos blancos se contagien de una enfermedad en algún lugar de su cuerpo, lo que significa que se detectará más temprano que tarde.
Al detectarlo antes, su cuerpo puede atacar más eficazmente la infección. La respiración pesada asociada con cardio puede ayudar a eliminar las bacterias no deseadas de su sistema respiratorio.
Mientras respira con calma como lo hace normalmente, cualquier bacteria que haya encontrado su camino allí puede instalarse. Sin embargo, al hacer que sus pulmones trabajen duro haciendo cardio, tienen una menor probabilidad de poder establecerse y darle un tos.
Si bien el ejercicio es beneficioso para su sistema inmunológico, esto no significa que de repente tenga que convertirse en una rata de gimnasio solo para mantenerse saludable. Puede obtener los beneficios del ejercicio en su sistema inmunológico simplemente haciendo una caminata rápida o trotando todos los días más o menos.
No tiene que ir a correr una maratón, solo una caminata rápida de 15-20 minutos es suficiente. En algunos casos, las personas pueden trabajar en exceso hasta el punto de que realmente terminan comprometiendo su sistema inmunológico más de lo que les ayudan, así que tómelo con calma.
